Quinto Patio

El fantasma de la destitución y cárcel por andar aprobando "cosas buenas que parecen malas" rondó este viernes en el Congreso local. Los más ciscados eran los panistas Gustavo Macías y Hernán Cortés; el primero es quien quería citar a la Comisión de Responsabilidades como secretario, y el segundo preside la Mesa Directiva. A Macías ya le tocó ser destituido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación e inhabilitado por hacer nombramientos y no atender suspensiones cuando le tocó encabezar la Mesa Directiva, por seguir órdenes del partido, y ahora se repitió el mismo escenario de presión.

Pero como la burra no era arisca sino que la hicieron, Macías se negó a convocar, pues temía que lo volvieran a poner contra las cuerdas en asuntos de interpretaciones jurídicas. El PRI y Morena ya habían decidido no asistir a las sesiones de comisión o pleno y dejarlos solos con toda la responsabilidad que se pudiera generar, porque ambos señalaban que era ilegal querer destituir al consejo y jueces a través de medidas cautelares dentro de un juicio político.

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Añadamos que Movimiento Ciudadano estaba dispuesto a apoyar de ser necesario, sin embargo, algunos miembros no estaban tan de acuerdo. Lo mismo pasó en el PRD. Al final el fantasma los hizo desistir por ahora, porque si no hubieran llegado los amparos lo habrían hecho pese a todo, dado que importa rayar en la ilegalidad y que se judicialicen las cosas, al fin y al cabo si les corrigen la plana, ya no estarán en funciones. El trasfondo político fue asustar a los miembros del Poder Judicial y mandar el mensaje de que o se alinean a lo que quieren o los quitan con medidas cautelares dentro de juicios políticos vía fast track. Los juegos de poder en el Legislativo.

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El gobierno estatal festinó ayer el acuerdo firmado en Lagos de Moreno entre el gobernador Enrique Alfaro y su homólogo de Guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, que permite a Jalisco “recuperar el agua para la entidad, respetando los acuerdos de 1995 y 1997, y garantizar el abastecimiento del agua en Los Altos y el Área Metropolitana de Guadalajara”. Jalisco recibirá 76 por ciento de las aguas del río Verde y Guanajuato el 24 restante.

¿Y qué sucederá con la suspendida presa El Zapotillo? Alfaro se deslinda: 1. “Es una obra que no hicimos nosotros” (“Yo te aseguro que yo no fui, son puros cuentos de por ahí; tú me tienes que creer a mí, yo te lo juro que yo no fui…”, cántese al estilo Pedro Fernández); 2. “Es una obra del gobierno federal” (o séase, no tengo vela en el entierro); 3. “Tendrá que ser el gobierno federal el que determine las características técnicas del proyecto”, (ái si se inundan o no pueblos, échenle la bronca a AMLO).

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Entre tanto, este viernes y a través de un comunicado, el Comité Salvemos Temacapulín, Acasico y Palmarejo y otras organizaciones reiteraron su demanda de cancelar la presa El Zapotillo, y en referencia al mandatario estatal señalaron que “tristemente no nos sorprende el viraje en su postura ahora como gobernador, aunque nos alarma que actualmente quiera imponer la presa con la cortina a 105 metros”, y se declararon decepcionadas de Alfaro Ramírez: “Honestamente esperábamos un poco más de usted como autoridad”. Ahora, por el acuerdo, vendrá nueva respuesta de los pueblos afectados.

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Sigue el caso de Joao Maleck y la muerte que con su vehículo ocasionó en Zapopan a recién casados. la Fiscalía del estado quedó mal parada. La ex ombudswoman Guadalupe Morfín escribió: “No aprendemos. Estas historias se repiten en varias administraciones estatales. Este es un golpe fuerte a la credibilidad de las instancias de justicia. Es jugar con la esperanza de un cambio, que anhelamos muchxs”.

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da/i