AMLO recibe pliego en contra de trasvase

El Observatorio Ciudadano para la Gestión Integral del Agua en Jalisco, entregó al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador –de visita ayer en Guadalajara para una reunión con empresarios–, un pliego con datos y peticiones con el afán de demostrar que no hay consenso para permitir que las aguas del río Verde sean entregadas a Guanajuato a partir del acuerdo de entendimiento firmado por ese gobierno y el de Jalisco.

El convenio con el estado vecino consiste en entregar 24 por ciento del agua al estado vecino, mientras que el 76 por ciento restante será para Guadalajara, municipios alteños y ganaderos de la meseta del oriente del estado.

El manifiesto, previamente publicado en periódicos locales, destaca la relevancia del agua en las labores productivas de los Altos de Jalisco, defendida como la región pecuaria más importante del país.

El observatorio sobrevive “a pesar de las recurrentes presiones de los concesionarios y grupos interesados en los grandes negocios a costa del bienestar de la población y medio ambiente”. Sus 20 vocales “manifestamos con profunda preocupación las decisiones gubernamentales que se han tomado con relación al proyecto Presa El Zapotillo, acueducto los Altos-León”.

Entre los puntos destacados, “este observatorio hace de su conocimiento que estamos profundamente preocupados por los posibles conflictos sociales y económicos que pueden presentarse en la región de los Altos por el despojo del agua. Asimismo, observamos que la seguridad alimentaria corre el riesgo de ser sólo un discurso, donde los que menos tienen serían los primeros afectados”.

Además, “dicho proyecto tiene una vocación de negocio y privatización del recurso hídrico, ya que desde su declaración (concepción) se señalan concesionarios” y “no se tiene la certeza técnica de que habrá agua suficiente para la distribución a la que se comprometieron los dos gobernadores en el acuerdo de entendimiento (…) y debido a eso, los porcentajes de agua mencionados no son reales, pues los decretos aludidos mencionan únicamente millones de metros cúbicos”.

El equipo del presidente recibió el manifiesto y otros documentos, por lo que en el observatorio esperan pronto ser recibidos por el mandatario para abordar el tema.

EL ZAPOTILLO SÍ VA

Sin embargo, pese a la entrega del documento, César de Anda Molina, coordinador del Consejo Consultivo para la Innovación, Crecimiento y Desarrollo Sustentable, y asistente a la reunión con el presidente, explicó que el Ejecutivo les comentó que sí se construirá El Zapotillo; sin embargo, primero consultará a la gente de la zona.

“Se reafirmaron algunas (propuestas) como El Zapotillo. (Anteriormente se informó) que una vez llegado el acuerdo entre Jalisco y Guanajuato, el gobierno de la República tomara la decisión de reiniciar la construcción de la presa, cosa que él se comprometió a hacerlo, fue su respuesta de inmediato (…) y ahora el presidente sumó un ingrediente que es escuchar a los pobladores de esa zona”, detalló.

A diferencia de César de Anda, el presidente de la Cámara Regional de la Industria de Transformación del Estado de Jalisco (Careintra), Juan Porras Brambila, consideró que el mandatario federal se mostró menos comprometido con el proyecto de la presa tras la definición de los porcentajes de agua para Guanajuato y Jalisco.

“Como que el nivel de compromiso en cuanto a los recursos bajó, el discurso bajó un poquito de nivel, lo sentí menos comprometido con esa causa”, comentó.

Constructores quieren cortina a 105 metros

Mientras el Observatorio Ciudadano para la Gestión Integral del Agua sostiene que no hay certeza técnica de que exista el agua de la cuenca del río Verde en la cantidad que ya se repartieron los gobernadores de la entidad y Guanajuato en un acuerdo del 29 de junio, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) y gremios afines presionan para que la Presa El Zapotillo se concrete con una cortina de 105 metros de altura, la apuesta más ambiciosa del proyecto hídrico y la cual inundaría al poblado de Temacapulín.

En rueda de prensa, los gremios recordaron el dictamen de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en el que rechaza que sea seguro instalar diques para proteger a Temacapulín de la inundación con una cortina de 80 metros, como se planteó originalmente, por lo cual insistieron en que se debe reubicar a la población que ahí vive para concretar la presa a su mayor capacidad, aspecto que sigue indefinido por el actual gobierno federal.

“En la publicación hecha por Conagua en 2014, denominada proyecto de aprovechamiento del río Verde-Presa El Zapotillo indica que finalmente la propuesta de 80 metros con diques para proteger Temacapulín no cumple con los parámetros mínimos de seguridad, poniendo en riesgo a los habitantes por una eventual falla (...) resalta la urgente necesidad de continuar y concluir con un proceso claro de concientización a los pobladores”, expuso Luis Rafael Méndez Jaled, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) Jalisco.

Recordó que la población afectada por la presa alcanza a 19 personas de Palmarejo, a 73 de Acasico y 333 de Temacapulín, todas en Cañadas de Obregón, poblados que inicialmente y hasta la fecha han rechazado la reubicación, pues no se les consultó el proyecto antes de construirlo. Violeta Meléndez

Es una aberración

El observatorio le expuso al Ejecutivo que la experiencia a nivel mundial ha generado nuevas políticas para evitar los trasvases entre cuencas, por el gran impacto ambiental, económico y social que generan: “El proyecto de abastecer a 14 municipios de los Altos a partir de El Zapotillo, es regresar el agua a las partes altas de la cuenca por un sistema de bombeo (longitud + tirante) que es una aberración técnica, aunado a una concesión que privatiza el servicio

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