Coprisjal, impedida 'vs.' los plaguicidas

Aunque se reconocen altamente tóxicos para los seres humanos, los plaguicidas que fueron encontrados en el organismo de estudiantes de primaria y secundaria en Autlán de Navarro no pueden restringirse en los cultivos agrícolas debido a que cuentan con registro sanitario para su venta en el país, respondió Armando Pimentel Palomera, director de Fomento Sanitario de la Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios de Jalisco (Coprisjal).

El funcionario aseguró que entre las atribuciones de la Coprisjal sí recae la vigilancia del almacenamiento y expendio de los agroquímicos, pudiendo retirar del mercado aquellos que no cuenten con autorización federal para su venta; sin embargo, mencionó que incluso aquellos que son posiblemente cancerígenos y se hallaron en los estudiantes pueden utilizarse con legalidad mientras no los prohíba el gobierno federal, lo cual se espera ocurra pronto.

“Lamentablemente este tipo de productos no podemos nosotros asegurarlos porque tienen una autorización por parte de la Cofepris a nivel federal, es decir, tienen un registro autorizado para estarse utilizando, sabemos que en algunos otros países ya están prohibidos, pero aquí siguen siendo utilizados”, justificó.

“Estamos seguros que la mayoría de productos aplicados son productos permitidos que tienen registro, pero que muchas veces quienes los aplican no lo hacen con el debido cuidado, a veces no usan las mascarillas, los overoles y a veces no dimensionan (...) En la mayoría de inspecciones que hemos hecho no hemos encontrado productos prohibidos, no podemos tomar medidas para que no los usen”, añadió.

Además, Pimentel Palomera mencionó que las autoridades a las que corresponde vigilar que los plaguicidas se apliquen de acuerdo a las normas son las secretarías de Agricultura estatal y federal (Sader), mientras que a las secretarías del Trabajo les compete la vigilancia para evitar que haya menores laborando.

Es de recordar que en el caso puntual de Autlán se encontraron plaguicidas en la orina de menores de las delegaciones El Mentidero y Ahuacapán; en el primer poblado, además de la exposición constante a diversidad de compuestos de los cultivos de la región, los niños han entrado en contacto con pesticidas que se vierten a un costado del plantel, en la parcela escolar que fue rentada a un particular para la siembra de pepino.

“Todas las parcelas, sobre todo las que están colindantes con viviendas y particularmente con escuelas, deben de tener, de acuerdo a una normatividad de Sagarpa (ahora Sader), un área de amortiguamiento o barreras de protección para evitar que se esté afectando a los habitantes de algunas localidades, es parte de las acciones que la Sagarpa tiene que estar vigilando en el campo. No son facultades de nosotros de la Coprisjal”, dijo.

“Esa parcela escolar tiene que estar siendo utilizada para práctica de los alumnos, pero lamentablemente la están rentando a particulares para tener un ingreso y están aplicando herbicidas. Ya solicitamos a los agricultores de esta zona que no estén aplicando el producto en horarios escolares, es uno de los compromisos de los agricultores, falta que la Sader esté vigilando que esto ocurra”, agregó el funcionario.

El funcionario aseguró que como parte de la respuesta institucional a este problema se acordó dar capacitación a los agricultores para aplicar de manera correcta los plaguicidas, protegerse y además hacer un cambio tecnológico para preferir el control biológico de plagas en lugar del químico. Aunque se espera que con un próximo decreto federal se prohíba una lista de compuestos que hoy se usan y eventualmente deberán sacarse del mercado.

“Estamos seguros que la mayoría de productos aplicados son productos permitidos que tienen registro, pero que muchas veces quienes los aplican no lo hacen con el debido cuidado”

Armando Pimentel Palomera, director de Fomento Sanitario de la Coprisjal

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