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(Foto: Especial)
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La mayoría de los 14 cadáveres recuperados entre el lunes y el martes en dos ranchos de Lagos de Moreno estaban momificados por acción de cal con la que los cubrieron.
La Fiscalía del Estado descartó la presencia de víctimas inhumadas en ambos lugares, pues todos los cuerpos estaban en la superficie y no había indicios de fosas clandestinas.
En el rancho El Puerto, a la entrada de una mina de estaño, fueron encontrados los cuerpos de tres varones y una mujer que tenían amarres en las manos y en los pies, en tanto que en una zona montañosa, escarpada, despoblada en el rancho San Cayetano fueron localizados nueve varones y una mujer, algunos de ellos maniatados.
El Puerto se localiza a la altura del kilómetro 122 de la carretera de Lagos de Moreno a Ojuelos. En torno a los cuatro cuerpos ahí localizados había cinco casquillos de calibre 9 milímetros. Sólo dos de los cuerpos tenía cal encima.
Uno de los hombres y la mujer ya fueron reconocidos oficialmente por sus familiares. Él tenía denuncia de desaparición de mediados de mayo, mientras que la familia de la víctima femenina perdió contacto con ella el jueves 11 de junio.
Las víctimas de San Cayetano tenían aproximadamente un mes de evolución cadavérica, nueve de ellos decapitados con las cabezas colocadas a un costado. Solamente un cadáver de varón estaba completo, aunque con huellas de desprendimiento por la acción de animales carroñeros de la zona.
En ese rancho las osamentas estaban distribuidas en un radio de 10 metros y todas cubiertas con cal. En ese lugar de intervención fueron asegurados 24 casquillos de calibre .380.
Todos los cuerpos fueron trasladados a la morgue de la Zona Altos Norte para la práctica de la necropsia y el registro para identificación forense.
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