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El Instituto de M�trica y Evaluaci�n de la Salud puntualiza que el uso del cubrebocas es la mejor arma contra el Covid-19. (Foto: Jorge Alberto Mendoza)
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La llegada de la vacunación anticovid a Jalisco y el uso generalizado de cubrebocas entre la población podrían reducir de manera real la incidencia de casos del nuevo coronavirus entre febrero y abril de 2021, según el modelo predictivo del Instituto de Métrica y Evaluación de la Salud (IHME, por sus siglas en inglés) de la Universidad de Washington (UW).
De acuerdo con lo observado por el IHME, Jalisco ha presentado una tendencia marcada por altibajos; sin embargo, los datos indican que los repuntes son cada vez más marcados.
La curva epidemiológica para el estado descrita por los especialistas de Washington refiere que en septiembre y durante la aplicación del botón de emergencia –se implementó del 30 de octubre al 13 de noviembre– hubo un claro descenso en los casos activos de la enfermedad.
Sin embargo, a inicios de octubre y justo después del botón hubo dos repuntes que provocaron picos de contagios más altos.
Según estimaciones del instituto, el 2 de septiembre había 10 mil 568 casos activos de la enfermedad en Jalisco, lo cual se consideró un pico de contagios. Para el 22 de septiembre hubo una reducción, pues se pasó a 7 mil 597 casos activos, pero luego comenzó un repunte hasta llegar al 12 de octubre a 11 mil 48. Por lo tanto, el pico final superó al inicial, lo cual se repitió con la activación del botón de emergencia.
El escenario peor y las vacunas
Al abordarse el caso de Jalisco, la UW considera que se encuentra en el peor momento de la pandemia en lo que va del año. Al corte de ayer habría más de 15 mil 600 casos activos y la curva continuará en ascenso.
El modelo predictivo especifica que la pandemia llegará a su máximo punto cúspide de contagios a mediados de enero y para ese entonces prevé varios escenarios.
Si todo sigue como hasta hoy, Jalisco alcanzaría más de 18 mil casos activos en el mes próximo, pero si se contempla la implementación de la vacuna, la cual se encontraría en su fase inicial en Jalisco, se evitarían alrededor de 700 casos activos.
Si a este escenario se le suma el uso generalizado del cubrebocas, el estado tendría a mediados de enero 12 mil contagios activos, es decir, una situación similar a la actual.
El IHME detalla que la vacunación tendría efectos representativos en Jalisco hasta finales de febrero, pero sería entre finales de marzo y abril cuando provocaría mayor efectividad en la prevención del Covid-19 que el uso de cubrebocas, siempre y cuando los protocolos y planes de vacunación se sigan.
Falta fortalecer uso de cubrebocas
Finalmente, el instituto recalca que el uso de cubrebocas es todavía la mejor arma contra el Covid-19 en caso de no poder mantener un aislamiento social. En Jalisco, el IHME no observa un uso generalizado, lo cual impide reducir la incidencia de contagios.
Según el IHME, por uso generalizado del artículo se entiende que 95 por ciento de la población lo porte de manera adecuada; sin embargo, en Jalisco solamente el 80 por ciento de la población lo utiliza.
Jalisco debe prepararse para constantes cuarentenas: INSP
El Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) de la Secretaría de Salud (Ssa) federal recomendó a las autoridades estatales estar prevenidas para constantes cuarentenas por repuntes del Covid-19.
A través del estudio Indicadores de pronóstico para apoyar medidas de mitigamiento y contención del Covid-19 en Sistemas Estatales de Salud: caso Jalisco, México, el INSP indicó que los estados deben buscar una reducción de la velocidad de reproducción del virus hasta llegar a un mínimo de 1.5. De conseguir esto, la curva se alargaría aún más, pero se salvarían más vidas.
Esta variable es conocida como el número básico de reproducción y se explica de la siguiente manera: si hoy se reportan 100 contagios y se tiene como base el 1.5 referido, mañana se registrarían 150, ya que la primera cifra se multiplica por la segunda.
En semanas anteriores, el especialista de la Universidad de Guadalajara (UdeG) Víctor Manuel González Romero indicó a NTR que no se puede hablar de una tendencia a la baja de la enfermedad hasta que no se tenga un número básico de reproducción menor que 1.
A finales de noviembre, el INSP observó un número básico de reproducción de 2.2 en el estado, el cual consiguió gracias a periodos de suspensión de actividades no esenciales; sin embargo, no es suficiente para contener la enfermedad.
Ante este panorama realizó varias recomendaciones, entre ellas fortalecer la aplicación de pruebas de detección para conocer la verdadera magnitud de la enfermedad, pues se corre el riesgo de sólo ver “la punta del iceberg”. También sugirió habilitar estrategias claras para mitigar las crisis económicas causadas por las cuarentenas. Lauro Rodríguez
JB
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