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CLUB DEPORTIVO. El ex gobernador sostiene que quiere ser entrenador de las Chivas. (Foto: Especial)
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El ex gobernador Enrique Alfaro Ramírez dio a conocer que con el fin de su sexenio tomará un año sabático y posteriormente, quizá, retomará actividades políticas.
“Voy a estar estudiando un rato como ya les dije y aquí (Jalisco) es mi casa y aquí voy a vivir, solamente estaré un rato sabático, un año sabático, un poquito menos tal vez, y luego ya veremos a ver qué sigue”, explicó.
Cuestionado sobre si luego regresará a actividades políticas y si respaldará a Jorge Álvarez Máynez en la contienda por la dirigencia nacional del partido Movimiento Ciudadano, mencionó: “No tengo ya actividades políticas, estoy retirado de la política, no voy a respaldarlo ni estorbarle ni nada, yo ya no participo en MC y en la política, y como ya lo expresé me retiro. Yo quiero ser entrenador de las Chivas, se los vuelvo a decir, ese es mi sueño, no tengo ninguna otra aspiración en la vida más que ser un buen papá, ser una buena persona y poder a los 51 años emprender un nuevo proyecto”, agregó.
Ayer, con la entrega de infraestructura sanitaria, aseguró que cerró con “broche de oro” su administración.
“Cerré todo completo, (el martes) pude hacer el último recorrido en la línea 4, nos faltó una estación, pero de ahí en más (queda) el orgullo de haber cumplido todos los compromisos que hice y terminar mi gobierno con mucho respaldo social y sobre todo con la tranquilidad de que la evaluación que hizo el pueblo de Jalisco en la última elección nos permite decir que hemos contado con el respaldo mayoritario de nuestra gente y cuando tú terminas así tu sexenio te puedes ir en paz”, expresó.
NIEGA SECUESTRO DE PERIODISTA
Por otro lado, calificó como mentira el secuestro del periodista Noe Zavaleta en la ciudad. Según el periodista Ricardo Ravelo, el plagio se dio por unas horas de la madrugada del miércoles.
“Fue falso, eso es falso, ¿qué les platico? yo no platico de falsedades”, expresó.
Tras ser liberado, Zavaleta informó: “Aun sigo en shock y bastante golpeado. Con rabia, frustración, pero también miedo. Efectivamente estuve retenido unas tres o cuatro horas que se me hicieron eternas. Me robaron mi reloj, vaciaron mis tarjetas, me dieron tremendo puñetazo y azotón de cabeza contra un azulejo cuando vieron que una de mis tarjetas apenas tenía 300 pesos de saldo. Quienes me robaron se dieron festín con una tarjeta”, agregó.
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