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(Foto: Michelle V�zquez)
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Habitantes y activistas de Juanacatlán realizaron una manifestación en el Centro de Guadalajara para pedirle al gobernador Pablo Lemus Navarro, y a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, que no se reactive la termoeléctrica “La Charrería” en Juanacatlán, al considerar que es altamente contaminante para la zona, la cual ya padece por la polución del Río Santiago.
El contingente llegó a Palacio de Gobierno con el objetivo de entablar diálogo con Lemus Navarro, sin embargo, no fueron recibidos. Luego, pidieron que saliera el secretario general de Gobierno, Salvador Zamora, lo cual tampoco sucedió.
Un momento tenso ocurrió al momento de decidir si entraba una comitiva a entregar un pliego petitorio, los elementos de seguridad cerraron la puerta del recinto, lo que generó consignas por parte de los habitantes. A través del megáfono, los coordinadores pidieron que la protesta se realizara en paz.
Posteriormente se dirigieron al Congreso de Jalisco, donde fueron recibidos por las diputadas Mariana Casillas, Tonantzin Cárdenas, Valeria Ávila, y el diputado Leonardo Almaguer. Ante la falta de diálogo con el ejecutivo, adelantaron que buscarán comunicación con autoridades federales.
Rebeca Nuño, del colectivo Un Salto de Vida, indicó que, además, el proyecto generaría una crisis hídrica porque las poblaciones, quienes tendrían que competir con las industrias por la poca agua limpia que queda.
Sostuvo que desde 2012, el Gobierno de México explicó que la generación energética a través de ciclo combinado o por medio del gas natural es una energía de transición hacia energías sustentables, ya que para el gas natural se extrae mediante el “fracking”, que afecta al medio ambiente.
“No tenemos por qué seguir dando nuestra agua, nuestra salud y nuestra vida para que la industria tenga energía para seguirnos matando y enfermando. Para nosotras es ya insostenible que se instale una empresa que va a extraer el agua subterránea, la poca agua limpia que nos queda a los pueblos del Río Santiago, para llenar de contaminantes nuestro aire”, dijo Nuño.
Amparos frenan construcción
Integrantes del colectivo Un Salto de Vida explicaron que hay tres suspensiones de plano que mantienen suspendido el proyecto hasta la fecha, porque todas las autorizaciones, excepto la del municipio, fueron obtenidas de entre 2018 a y 2019.
“El juez nos concedió era que nuestro derecho a la salud, a un medio ambiente y a la autodeterminación como pueblo estaban siendo o estaban en riesgo”, explicó la activista Rebeca Nuño.
Nuño subrayó que el juicio de fondo no se ha resuelto porque aún faltan algunas periciales que se deben presentar tanto del juzgado como de su parte. “Ha sido un proceso muy lento. Llevamos 6 años en estos amparos”, dijo.
Exigen medio ambiente sano
Las nueve exigencias se dirigieron a Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta de México; Claudia Gómez Godoy, comisionada especial para la restauración de la cuenca del Río Lerma-Santiago; Luz Elena González Escobar, secretaria de Energía; Emilia Calleja Alor, directora de la Comisión Federal de Electricidad; Pablo Lemus Navarro, gobernador de Jalisco; Carlos Lomelí Bolaños, senador; Manuel Herrera Vega, secretario de Desarrollo Energético Sustentable de Jalisco; y al Congreso de Jalisco.
Entre las exigencias más importantes destacaron:
- Que transparenten ubicaciones exactas donde se están realizando los estudios de factibilidad y desistan estudios de factibilidad y la construcción de la termoeléctrica Juanacatlán y en los pueblos de la cuenca del río Santiago.
- Se respeten las suspensiones de plano a favor del pueblo originario de Juana contra la Central de Ciclo Combinado La Charrería en de los amparos 223/2 5/2024 llevados en el Juzgado III y el Juzgado IV de distrito en materia administrativa del tercer circuito.
- Se derogue el Plan de Ordenamiento Territorial Metropolitano (POTmet) y construya con las comunidades un ordenamiento regional de la Cuenca del Santiago, con perspectiva de Restauración Ecológica y de reparación integral los daños a los pueblos.
- Plan de atención y prevención de daños a la salud en la población afectada por la contaminación ambiental, y que se otorgue atención médica adecuada en condiciones de disponibilidad, accesibilidad, aceptabilidad y calidad, conforme a los estándares internacionales aplicables.
jl
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