Un recorrido por las casas de Luis Barrag�n

Cada casa en la ciudad tiene autor. Sin embargo, hay algunas que dejaron huella en la historia de la arquitectura local, nacional e internacional. Sin duda, las creadas por Luis Barragán son algunas de ellas.

Por su diseño, composición, arreglos, propuesta y estilo, las múltiples casas construidas por el ingeniero civil y arquitecto tapatío, Luis Barragán, en su ciudad natal son dignas de admirar ya que han sobrevivido a los años. Y, aunque no todas están conservadas, vale la pena recordarlas y ver en qué estado se encuentran o qué albergan actualmente.

Casa Prosperidad

Como casa habitación, donde vive la señora Patricia Cortés Hernández desde hace 13 años, se encuentra la edificación construida en el año 1928 por Luis Barragán. Dentro del Barrio del Alacrán, sobre la calle Prosperidad número 74, la casa que ya se nota deteriorada es rentada.

El estilo de la casa, según la placa que aguarda al frente de la vivienda, tiene “elementos del pasado hispano, a través de la ventana geminada que se observa en la fachada, el uso de las tejas y los pretiles rematados con formas mixtilíneas. El uso decorativo, sería una práctica que repetiría (Barragán)”.

Sin embargo, para la actual inquilina, la casa “es muy grande, pero el problema es que los cuartos están muy juntos, están muy chicos, casi no alcanza una recamara matrimonial”. Además, comentó que cuando tiene algún desperfecto ella misma la repara.

En cuanto a vivir en una casa diseñada por Luis Barragán, no tiene ningún reparo ya que cuando comenzó a rentar no sabía ni quién era él. “Seguido vienen varios estudiantes a querer verla”, pero ella les responde que “es casa para vivir no es para que tu vayas a ver, como museo”. Sin embargo, no le molesta, aseguró. 

Casa Robles Castillo

Actualmente, la edificación se encuentra en remodelación. Construida en 1927, sobre la avenida Vallarta 1095, la edificación fue dividida para albergar diferentes negocios como bares y restaurantes. Y aunque el arrendador (quien no dijo su nombre) señaló que la casa no fue construida por Luis Barragán, sino por el hermano del primero, la edificación se encuentra catalogada con la autoría del ingeniero.

Sin embargo, el grafitti ha llegado a las paredes de la casa, cubriendo casi en su totalidad el aspecto “regionalista” que le dio Barragán al crearla.

Casa Orozco

Después de algunos años de descuido, la Casa ubicada en López Cotilla 814, ahora luce limpia, cuidada, con jardines perfectos y un color blanco en sus paredes.

El estilo sencillo de su fachada donde sobresalta la ventana abierta que deja ver el cielo, es ahora la sede de un consorcio de arquitectos.

La Casa Orozco, nombrada así porque fue construida para el muralista entre 1937 y 1938, es digna de mirar por fuera, ya que no tiene acceso al público.

Casa González Luna

Ahora llamada Casa ITESO Clavigero, debido a que pertenece al Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Occidente (ITESO). La casa fue construida en 1928 para Efraín González Luna, abogado y político jalisciense.

Desde 2006 fue nombrada por el Instituto Nacional de Bellas Artes como Monumento Artístico de la Nación, la cual es cuidada por la escuela que desde 2001 le da uso de museo y espacio cultural.

La idea original de la vivienda tenía como consigna contar con biblioteca, oratorio y jardín. Después, fue ampliada por Ignacio Díaz Morales en 1938. La casa está ubicada en José Guadalupe Zuno 2083.

Casa Cristo

Con una influencia oriental que cuenta con arcos parabólicos y declarada Patrimonio Artístico de la Nación. La Casa Cristo es sede del Colegio de Arquitectos del Estado de Jalisco desde 1988.

La edificación fue construida en 1929 por Luis Barragán como encargo de Gustavo R. Cristo, ex presidente municipal de Guadalajara.

Debido a su uso, el estado de la casa está conservada y digna de mirar en la esquina de Pedro Moreno y Marsella.

Luis Barragán, su historia

Nació en Guadalajara el 9 de marzo de 1902 y murió el 22 de noviembre de 1988 en México, D.F. Considerado como uno de los arquitectos más importantes del siglo XX, fue el único en obtener el Premio Pritzker, esto en el año de 1980.

Se graduó como Ingeniero Civil y Arquitecto en 1925. Posteriormente vivió durante dos años en Europa, visitando lugares que lo influenciarían en su diseño arquitectónico, especialmente el estilo mudéjar, con el que encontró un puente perfecto entre las necesidades climáticas de Guadalajara.

En 1936 se mudó definitivamente a la capital mexicana, donde construyó otras obras que lo pondrían como uno de los mejores en el país.

Entre sus obras también destacan las Torres de Ciudad Satélite, Fuente de Los Amantes, Casa Gilardi, la Capilla del convento de las Capuchinas Sacramentarias del Purísimo Corazón de María y, por su puesto, su Casa Estudio Luis Barragán.

El Museo de la Ciudad brindó el año pasado recorridos por las casas construidas por Luis Barragán, como forma de conocer y acercar al público tapatío y turistas a los inmuebles representativos arquitectónicamente.

Durante los próximos meses no se realizará alguno con este tema, pero la organización está abierta a recibir propuestas.

PHM