Como si no hubiese ya bastante confusión para el electorado con la famosa coalición total entre el PAN, el PRD y el partido Movimiento Ciudadano en las candidaturas federales –Congreso de la Unión– y parcial en las correspondientes a alcaldías y diputados locales, el dirigente estatal del partido del sol azteca, Víctor Hugo Prado, puso un ingrediente más a este asunto.
Anunció que podrían darle las gracias al único aspirante que se registró como precandidato a la gubernatura en tiempo y forma, Carlos Orozco Santillán, para abrirle la puerta a un aspirante… externo.
Y si como partido de izquierda no tuvieron empacho para aliarse con la derecha del país y no tienen dificultades para posicionar al panista Ricardo Anaya como su candidato presidencial –a decir del propio Prado–, tampoco tienen conflicto para ajustar sus normas, estatutos y tiempos al gusto del mejor postor, aunque eso signifique ningunear al único precandidato registrado.
En una entrevista con un diario local, el dirigente estatal del PRD aseguró que en el caso del candidato a la gubernatura donde no hay alianza con otros partidos “vamos a seguir trabajando en la pista de nuestro candidato (…), que tiene que ser un actor que esté en condiciones de atraer el voto hacia el PRD…”.
Quiero entender que quien pueda “atraer el voto hacia el PRD” tendría que ser un perfil que represente a este partido de izquierda en Jalisco, que creo que inicialmente cubre muy bien su hoy precandidato Orozco Santillán, más allá de si es o no competitivo y si tiene posibilidades de ganar o jugará simplemente un papel testimonial.
Pero la sorpresa en esta entrevista viene cuando Víctor Hugo Prado revela que están dialogando con otros dos personajes que inicialmente aseguró “han mostrado su interés” en abanderar al PRD por la gubernatura, pero más adelante confesó que es el partido o la dirigencia los que “estamos tratando de interesarlos”. ¿Entonces?
Por esta razón, explicó que en el partido hacen “las valoraciones y los ajustes en nuestra norma, en nuestros procedimientos”. En una palabra, ¿significa, entonces, que pueden mandar al diablo sin problema alguno la convocatoria emitida y a la que solamente un interesado (Carlos Orozco) respondió en tiempo y forma?
Prado se reservó los nombres de los dos prospectos quienes les están coqueteando o a los que el PRD les coquetea, pero aseguró que no son militantes, sino que “son externos”.
Sobre si aún está abierto el registro de aspirantes a la candidatura, el dirigente perredista demostró que las reglas internas son tan flexibles que pueden modificarse como la dirigencia en turno quiera. Dijo: “Cabría a hacer ajustes de manera interna, llegar a acuerdos con quien esté registrado para que pueda darle la oportunidad de que pueda contender alguien que no se registró”.
¿Esto quiere decir que le pedirán a Carlos Orozco que dé su anuencia para que se registre fuera de tiempo quien probablemente termine por derrotarlo en la contienda interna o simplemente se trata de levantar un teatro perredista para simular una elección democrática donde el elegido será quien primero se registró? No creo que sea necesario eso.
Y como para no dejar dudas de que el hoy aspirante registrado ya no les llenó el ojo, Víctor Hugo Prado encontró la llave para abrirle la puerta de la candidatura a un externo. Dijo: “En otras palabras, sería declarar el registro de la precandidatura a partir de un acto de declinación de quien en estos momentos ostenta la precandidatura”.
¿Se prestará a este burdo juego Carlos Orozco Santillán? ¿Será otra charlotada más que se suma a las que ya nos han dado con eso de la alianza, donde su candidato presidencial anunció que apoyará a los tres candidatos a la gubernatura, quienes contenderán como rivales?
ES TODO, nos leeremos ENTRE SEMANA.
JJ/I
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