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Alcalde de Zapotlanejo ve linchamiento priísta en acusaciones de violencia

(Foto: Lauro Rodríguez)

El alcalde de Zapotlanejo, Héctor Álvarez Contreras, se dijo libre de culpa tras las acusaciones en su contra por violencia política por cuestiones de género contra la regidora priísta Refugio Camarena.

“No hubo manifestaciones ni expresiones de desprecio en particular hacia la regidora, quien siempre ha tenido la misma representatividad y espacio que todas y todos los regidores se han ganado. Así mismo nunca se ha ejercido poder desmedido”, comentó.

Por el contrario, le devolvió la acusación al aseverar que fue la edil priísta la que lo violentó durante la última sesión de ayuntamiento.

“Me dijo cabrón”, aseguró ante medios de comunicación el primer edil de Zapotlanejo, quien aseguró que ese tipo de vocabulario “no son propios de una dama respetable, y para mí, la regidora es una dama respetable”. Estas fueron las palabras de un alcalde que dijo haber cumplido con un curso sobre violencia de género y machista a inicios de este año.

“La violencia política es de ida y vuelta. En este caso, yo fui agredido verbalmente. En un momento en particular entendí de manera clara que me recordaba, con señas obscenas, no propias de una dama muy respetada como es ella, me recordaba a mi santa madre que ya descansa en paz”.

Señaló al PRI de quererse colgar del tema rumbo a las elecciones del 2021 y por eso, el tema llegó hasta el Congreso de Jalisco. “La están utilizando (a la regidora)”, aseguró en rueda de prensa en la que estuvo acompañado de una regidora del PAN, una de su partido MC, y dos directoras de área del gobierno municipal. “Para que vean que hay inclusión”, remató.

“Es muy importante suplicar que se revise el video público con mucha objetividad. A mis inquisidores y detractores se les hace muy fácil acusar y señalar con denuncias en los medios de comunicación y en las diferentes redes sociales. Fue una sesión de carácter ordinario en dónde los hechos hablan por sí solos”.

Dijo que analizarán responder por la vía jurídica, pues podría poner su propia denuncia por violencia política contra la regidora.

Respecto a los hechos de diciembre, cuando el primer edil agredió a una mujer físicamente, dijo que lo hizo como un acto de defensa de su hijo. “Me lo iban a matar”, trató de justificar. Aceptó que por recomendación de organizaciones sociales feministas y el gobierno del estado, acudió, junto con 40 integrantes del gobierno municipal, a un curso para erradicar la violencia contra la mujer y machista.

EH