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No es clase presencial

El 18 de febrero, el secretario de Educación, Juan Carlos Flores, acompañado del subsecretario de Educación Básica, Pedro Díaz Arias, anunció importantes estrategias voluntarias para escuelas, alumnos y padres de familia, y ofertar un servicio educativo con mayor presencia. 

Se toman acciones ante lo que la sociedad ha demandado, como un plan de reactivación económica, ya que para los padres ha sido un impedimento para poder desarrollar sus actividades. También dará solución a los riesgos de salud mental que enfrentan niños y jóvenes ante el aislamiento. 

De una manera breve, clara y objetiva explicaron y atendieron dudas del auditorio. En diferentes momentos el secretario aclaró que lo más importante es cuidar la salud de las personas, por lo que hay que evitar riesgos y atender protocolos sanitarios; aclaró que no son clases presenciales, sino sesiones de preparación para el regreso a clases en agosto, donde se podrán realizar diagnósticos, retroalimentación, acompañamiento y complementación de evaluaciones. 

Abrió la posibilidad de realizar actividades deportivas y culturales en espacios abiertos y en grupos limitados a nueve alumnos, así como talleres y laboratorios, pudiendo alcanzar hasta 30 por ciento de la capacidad áulica en educación media superior o bachillerato. 

Se podrá aumentar en una semana la frecuencia de asistencia hasta por cuatro días sin descuidar las clases virtuales a distancia para quienes decidan no asistir. El compromiso de los padres de familia debe ser seguir cuidando a sus hijos sin que asistan a zonas de riesgo. Directivos y docentes tendrán un nuevo reto para encontrar la logística que equilibre las clases virtuales y el voluntario seguimiento académico presencial. 

Se reconoce al secretario su confianza para que cada institución, acorde a sus capacidades, haga el planteamiento para enfrentar la posibilidad del regreso a clases paulatino. Seguramente será reconocido el estado por su valentía al ser pionero en decisiones determinantes ante la pandemia. Con dicha medida se buscará atender a los alumnos rezagados, especialmente a quienes sufren ausentismo o están imposibilitados para hacer uso de tecnología para avanzar en los programas educativos. 

De nuevo, docentes y directivos tienen la oportunidad de ser agentes de cambio. Las diferentes asociaciones de escuelas particulares han reconocido la apertura para libremente tomar la decisión de poder ofertar su servicio y así evitar el cierre definitivo. El sector público, en especial los preocupados por el proceso de enseñanza y aprendizaje, también han visto con agrado la determinación para atender mejor a sus alumnos y evitar el rezago y los daños a la salud física y mental. 

Es así como, sin imposiciones, con la libertad de gestión de cada escuela, mediante un diálogo abierto y dando las herramientas necesarias, la SEJ ha logrado dar solución a las peticiones de escuelas, asociaciones, directivos, maestros, alumnos y padres de tener mayor presencia sin descuidar los protocolos de salud y el libre albedrío de la comunidad. 

Recordemos que Jalisco fue el que a nivel nacional tomó la primera decisión para suspender las actividades escolares y hoy que existe mayor conocimiento de la propagación del virus, mayor atención personal en el cuidado de la salud y que hemos comprendido que debemos convivir con responsabilidad es vanguardia en promover la mayor presencia en las escuelas. 

jl/I