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En recuerdo de Hipatia

Hipatia, famosa por su belleza, inteligencia y virtud, no fue sólo la cabeza de la escuela de filosofía neoplatónica alejandrina sino también la primera mujer destacada matemática y astrónoma 

Naomi y Jay Pasachoff, ‘The Biographical Encyclopedia of Astronomers’, Springer, New York (2007), p. 544 

 

Este 8 de marzo cuando por iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en 1977 (según https://www.un.org/en/observances/womens-day) se estableció como día para conmemorar a las mujeres en sus logros y realizaciones, también –según algunos autores– es el día que en el año 415 de nuestra era murió la sabia Hipatia de Alejandría, y cuyo recuerdo perseguiremos en diferentes fuentes. 

El chileno-español Alejandro Fernando Amenábar (1972) dirigió la película Ágora, estrenada en octubre de 2009, donde Hipatia, interpretada por Rachel Weisz, es el personaje principal y se relata junto con su vida y parte de su obra la destrucción de la muy célebre Biblioteca de Alejandría; con una sobria producción visualizamos lo que pudo ser el funcionamiento de ese centro del saber en la antigüedad y cuyo precedente en imágenes nos lo relató a los de mi generación el recordado doctor Carl Sagan en el capítulo 1 “En la orilla del océano cósmico” de la serie Cosmos: un viaje personal (1980). 

En el plano literario debemos al doctor en astrofísica Jean-Pierre Luminet (1951) la novela El incendio de Alejandría (Ediciones B 2005), titulada en el francés original como Le bâton d’Euclide (El bastón de Euclides), si bien con las licencias propias de toda obra literaria podemos decir que es precisa en cuanto al conocimiento de la naturaleza descrito en sus páginas a través de diversos autores y obras ahí mencionados. Ya en los anexos de la novela escribe el doctor Luminet acerca de Hipatia: “Sus obras (perdidas todas ellas) incluían un Canon astronómico un comentario a la Aritmética de Diofante, un comentario al Tratado de los cónicos de Apolonio de Pérgamo, y editó el tercer libro de los Comentarios sobre el Almagesto de Tolomeo de su padre Teón” (Op. Cit. p. 267). 

Quizá pudiéramos hipotetizar que la representación de su habilidad de matemática, por los títulos de sus obras perdidas, aunado a su destreza en el conocimiento astronómico, en el filme de Amenábar están sintetizados en la escena donde (advertencia de contenido) auxiliada de una vara y una cuerda dibuja en la arena la solución a la posición de los planetas que en la historia de la astronomía sabemos correspondió resolver a Kepler. 

Notamos también una evolución en la historiografía sobre la célebre alejandrina, pues mientras en el volumen correspondiente la ciencia antigua y medieval de la enciclopédica History of Science (Basic Books 1963) editada por René Taton (1915-2004) sólo menciona a Hipatia como la famosa hija de Teón y la última miembro del Museo Alejandrino, en libros más recientes ya mencionan acerca de sus obras. 

Twitter: @durrutydealba

jl/I