Activan títeres en el espacio público

En el borde de la banqueta, de cara a la avenida Juárez, un dragón que parece de papel hacía su rugido para parar al tráfico de bicicletas que paseaban por la Vía RecreActiva de este domingo. Sí se detenían y, armados con sus celulares, se arremolinaban alrededor de la creatura mítica para tomarle fotos y videos. 

Se trataba de un artefacto realizado por el legendario titiritero Humberto Galicia para Luna Morena, la compañía de títeres más relevante de la ciudad que este fin de semana comenzó las actividades de su festival internacional, el Festín de los Muñecos, que cumple en 2019 su aniversario 15 en edición 10. 

El dragón era el más grande de todos los títeres que tomaron ayer el Jardín del Carmen, la plaza pública ubicada en frente del templo del mismo nombre y que hicieron un circuito de activaciones públicas que encantaron a adultos y niños durante una hora. La idea de esta parte del festival es llevar el teatro de títeres a las calles y no esperar a que sean ellos quienes busquen los boletos de las butacas en los teatros. 

Así entre los árboles y los niños corriendo, bajándose de las bicicletas y pidiéndoles a sus padres que fueran, cinco artistas de diferentes países activaron partes de sus espectáculos con los transeúntes. 

El primero que se veía al llegar era Aroldo, un títere vagabundo y gruñón que toca el acordeón y baila cargando una mochila infinita y que es originario de Quebec, con el que todos se querían tomar fotos porque su pequeña estatura y movimientos extraños no dejaba de asombrar a los asistentes. 

También estuvo El Peregrino de Bello Abril, una compañía de Chile-Australia que realiza espectáculos y pequeñas historias en miniatura para unos cuantos espectadores, en el caso de la de este domingo para dos personas, donde además de música a través de unos audífonos hay pequeños artefactos en una especie de caja que cuelga del cuerpo de la artista y que despertaba la inquietud y la curiosidad de los otros espectadores que se arremolinaban alrededor de los dos que experimentaban con nubecitas y letreros. 

El Otro, un títere de tamaño humano también originario de Quebec cuyo único objetivo es el asombro y que ha deambulado por varias partes del mundo, también estuvo tomándose selfies con el público y haciendo a los niños quedarse mirando con asombro a las hazañas de sus animadores.  

Con un número más largo también participó en el acto público el Gran teatro dentro, un personaje italiano de Frausto Barile, que esconde en su barriga y en parte de sus costillas donde ocurre con objetos y magia física, de donde salen humo y burbujas encantando sobre todo a los niños. 

Al final las activaciones condujeron al público al Ágora del Ex Convento del Carmen, donde, ya a la italiana, se presentó la obra Cuentos para no dormir, una de las primeras obras de Luna Morena que mantuvo con risas y grititos a los niños del público asistente. La obra cuenta varias historias distintas con muñecos, de niños que se portaron mal y fueron víctimas de crueles destinos: como explotar por comer tantos dulces, o que el sastre le corte los pulgares con unas tijeras a un niño que no deja de chuparse el dedo. 

Cada asiento estuvo ocupado y algunos niños incluso permanecieron la función entera sentados en el piso muy cerca del escenario donde interactuaron con los actores y tuvieron acceso al final, a una exposición donde los espectadores pudieron observar maquinarias internas de otros títeres de Humberto Galicia para comprender un poco mejor la vida detrás de los títeres.

No te lo pierdas

Las actividades continúan en la semana en sedes como el Teatro Torres Bodet, el Foro de Arte y Cultura y en mayormente el Conjunto Santander de Artes Escénicas. El programa puede descargarse en el sitio web del Festín de los Muñecos

Para saber

Las activaciones comenzaron el sábado en Etzatlán, Jalisco, y tras la del domingo en el Ex Convento del Carmen siguieron por la tarde en Tequila

JJ/I