Hernández seduce a los jóvenes con chistes y chismes

Con su peculiar forma de contar chismes, chistes, anécdotas y vivencias personales, el escritor Jorge F. Hernández sedujo a los jóvenes con la intención de que lean y se expresen a través de la escritura.

La charla, parte de las actividades de FIL Jóvenes, la inició siendo irreverente señalando que veía a un público joven cuando era el único adulto, pero que traía su pañal para cualquier emergencia, y les recordó que inició a escribir a los 7 años sobre un niño que no usaba calzones y cuando parecía que convencía al director, al final le ordenan que se ponga los calzones. Diez años más tarde escribió su primer cuento.

El autor contó que sus primeras visitas a la FIL fueron como gorrón por todas las bebidas que ofrecían y como oyente de los autores que admiraba y le parecían incansables, y ahora lo hace sobrio como exponente de sus vivencias.

Los jóvenes que asistieron a la charla se reían con cada una de sus anécdotas y sirvió para recordarles que la lectura es lo único que lo ha salvado como adulto.

El escritor los invitó a equivocarse para mejorar y si no les gusta un libro, que lo dejen, porque lo peor es forzarlos a leerlo “porque es igual como las novias, no te pueden obligar a tener una que no te guste”.

Para escribir, Jorge F. Hernández señaló que las mejores fuentes de inspiración son los chismes y los chistes, porque “entre mejor se cuenten, generando esa tensión en la narración sin contar el final, es el preámbulo para escribir bien”.

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