Abren negocios no esenciales en Jalisco

Al parecer muchos de los negocios no esenciales que por la pandemia no deben operar aún, hicieron caso omiso del mensaje en el que el gobernador Enrique Alfaro se retractó para que estos giros operaran a partir del 1 de junio y no a partir de ayer. Estéticas, tiendas de regalos, ropa y accesorios celulares levantaron cortinas en diferentes zonas de Guadalajara y Zapopan, incluso a metros de los edificios de ambos ayuntamientos. 

En el Centro de Guadalajara, 10 por ciento de las jugueterías de la calle Juan Manuel abrieron, así como unos siete establecimientos dedicados a la venta de regalos y novedades. El caso más notorio ocurrió sobre la calle Independencia, justo a espaldas del Ayuntamiento de Guadalajara, en donde tres tiendas de venta de artículos religiosos volvieron a levantar cortinas, ya sea por completo, o a la mitad, para atender a compradores. 

En Zapopan, el comportamiento fue similar. A una cuadra de la presidencia municipal, abrió una peluquería, así como tiendas de accesorios celulares, venta de fragancias y se registró la instalación de vendedores ambulantes que ofertaban cubrebocas, relojes, perfumes y frutas. Hasta ayer a las 15 horas, estos negocios y comercios permanecían abiertos. 

En el mercado de Atemajac, negocios de venta de ropa para dama mostraban y vendían sus prendas sin la menor restricción. 

La zona de San Juan Bosco, al oriente de la ciudad, mostró la misma tendencia. En la esquina de la calle 54 e Industria, un pequeño conjunto de negocios de venta de accesorios celulares abrió sus puertas, así como una tienda de ropa y una de venta de electrodomésticos, ubicada sobre Belisario Domínguez y la calle Esteban Alatorre.  

Ése fue el común de muchos negocios que, aprovechando la confusión, aprovecharon para levantar cortinas de nuevo y reactivar los dos meses de pérdidas tras la emergencia sanitaria. Cabe señalar que ninguno de los negocios sondeados por NTR en esa zona contaba con las medidas de sanidad apropiadas. 

Pero fue el mismo caso en Chapultepec. En otro recorrido por esa zona se pudo constatar que, con reducción de aforo, filtros sanitarios y una lona auspiciada por la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), la mayoría de los bares ya reabrieron sus puertas. 

Su justificación: venden alimentos y restringirán el consumo de bebidas alcohólicas. La mayoría de los que decidieron reabrir, para la hora de la comida ya contaban con clientela. Eso sí, las filas y aglomeraciones no fueron permitidas. En el ingreso, uno de los empleados recibe a los comensales con un “buenas tardes” y un “me permite” que hace referencia a la colocación de gel antibacterial y la medición de la temperatura con un dispositivo láser. Después, es seguido con un “pase, adelante”. 

Los meseros portan cubrebocas y guantes. Algunos, incluso usan careta. Fueron los únicos negocios que abrieron ayer en Chapultepec, además de los esenciales que nunca cerraron las puertas, como servicios de atención a clientes de telefonía, bancos y restaurantes. 

Venta de ropa, calzada, librerías, mueblerías y uno que otro bar permanecieron con las puertas cerradas. 

EN OBREGÓN, VENDEN A PUERTA CERRADA 

Otro de los corredores comerciales más importantes de la ciudad, Obregón, también amaneció y permaneció con los negocios esenciales cerrados. Incluso, más de uno con sellos de clausura del gobierno municipal. 

Sin embargo, las ventas no pararon. Hubo empresarios que se aventuraron a comercializar a puerta cerrada. Es decir, el local parecería que no tiene productos a la venta, pero, hay uno de los empleados afuera del negocio y soluciona dudas entre los potenciales clientes, ahí, finalizan las ventas, sin la necesidad de abrir. 

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