Ojalá el caso Teuchitlán sea un parteaguas: Carmen Chinas

La situación de impunidad en el ámbito de seguridad en México ha alcanzado un punto crítico, como lo señala Carmen Chinas Salazar, coordinadora del Comité Universitario de Análisis de Desaparición de Personas de la Universidad de Guadalajara (UdeG). La reciente apertura del Rancho Izaguirre en Teuchitlán por parte de las autoridades se presenta como una oportunidad para un cambio significativo en la respuesta del gobierno ante la crisis de seguridad que ha persistido durante años.

Chinas Salazar destacó la indignación social generada por este caso, la cual debe servir como un catalizador para que los tres niveles de gobierno coordinen esfuerzos y aborden de manera efectiva la inseguridad. Recordó el sexenio pasado como un “sexenio horrible en temas de inseguridad” y contó cómo en la vigilia nacional del sábado pasado sobre Teuchitlán, una de las consignas más coreadas fue: “(Enrique) Alfaro sí sabía”.

La coordinadora también criticó la falta de infraestructura en los municipios para garantizar la seguridad, ejemplificando con los enfrentamientos del día de ayer en Autlán, Jalisco, donde los ciudadanos se vieron obligados a refugiarse en sus hogares sin recibir protección ni aviso por parte de las autoridades locales. Además, denunció la normalización de la violencia y la necesidad de que las autoridades asuman su responsabilidad en la protección de la población.

Finalmente, Chinas Salazar hace un llamado a investigar a fondo el caso Teuchitlán, enfatizando la importancia de la transparencia y la rendición de cuentas. Insta a la sociedad a mantenerse vigilante respecto al trabajo de las autoridades y a no permitir que este caso se convierta en otro ejemplo de impunidad, subrayando la urgencia de localizar a las víctimas y esclarecer la situación de aquellos que aún están desaparecidos.

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