Se forma en Tonalá un 'Rancho Antigobierno'   

“Cuando hacemos justicia por nuestra propia mano tenemos un pacto: nadie ve nada, sabe nada, dice nada”, confirmó un vecino de la colonia Rancho Antigobierno, nombrada así por ellos, cercana al fraccionamiento Jardines del Prado, en Tonalá.

El lunes, personal de la Policía tonalteca y de la Policía Estatal solicitaron a los colonos quitar tres lonas en las que advierten a los delincuentes: “Vecinos organizados: ratero, si te agarramos no vas a ir a la comisaría, te vamos a linchar, nosotros no llamamos a la Policía”. Las lonas están ilustradas con una pistola y una cámara de videovigilancia.

En la polvareda que levantan los camiones de volteo en las calles de tierra de esta colonia, las cámaras de vigilancia registran los movimientos de los fuereños; cuando los vecinos detectan personas extrañas se comunican por medio del grupo de WhatsApp llamado Antigobierno, en el cual se organizan y luego salen a indagar.

Antonio Fierro, vecino y representante del Rancho Antigobierno, relató que, pese a las medidas de seguridad, no es una colonia hostil con los visitantes o con las autoridades, “solo con los rateros”, enfatizó.

La razón de las medidas es el hartazgo a la inseguridad, el cual se remonta por lo menos ocho años atrás. Durante este periodo, los vecinos pidieron a los gobiernos municipales y estatales servicios básicos, como drenaje, agua potable, electricidad, y seguridad pública, pero las autoridades nunca les cumplieron.

Sin atención gubernamental y ya con lotes adquiridos –“no somos paracaidistas”, aclararon–, cavaron fosas sépticas e hicieron una red de agua potable, compraron generadores de electricidad y tendieron alumbrado público con postes adquiridos por ellos. Además, rellenaron baches de las calles para poder circular. 

La ausencia de seguridad pública, según Antonio Fierro, es notoria por ciertos hechos: “(En la colonia han hallado) cuatro cadáveres –dos envueltos en cobijas, uno ejecutado y otro abandonado–, una mujer fue violada y (han ocurrido) decenas de asaltos”. Además, los parajes oscuros de la colonia son usados para abandonar autos robados, secuestrar personas y atracar a conductores de Uber.

Ante las circunstancias, la colonia decidió ya no pagar las cuotas a los policías municipales y ser autónomos. “El gobierno no sirve como autoridad, ya perdió el control, falta poco para que aquí sea un nuevo Cherán”, dice Antonio Fierro en referencia al municipio con autogobierno en Michoacán.

En los últimos años, recordó Fierro, la comunidad ha linchado a varios ladrones que robaban en flagrancia: en un video muestra cómo un hombre joven es pateado por varios hombres y conducido a las afueras de la colonia; así sucedió con otros 15 provenientes de las colonias Colimilla, Jalisco, Amiales, Luis Donaldo Colosio y Bethel.

Pese a que la titular de la Fiscalía Central, Marisela Gómez Cobos, aseguró que se detendrá a los vecinos que linchen a otras personas, pues cometen un delito, los vecinos continuarán ante el fallo de los cuerpos de seguridad para brindar tranquilidad a la colonia, el municipio, en el país, afirmaron.

El representante vecinal recordó que en la reunión que sostuvieron con un comandante de la Policía de Tonalá el lunes le dijeron: “Con todo respeto comandante, pero no vamos a quitar las chingadas lonas de los muros, porque son propiedad privada y ustedes, como autoridad, no sirven”.

EH/I