INICIO > OPINION
A-  | A  | A+

¡Disfrutemos y protejámonos!

Prácticamente ya inició el periodo anual de mayor consumo de bebidas con alcohol: cerveza, sidra, ponche, vino de mesa, tequila, brandy, vodka, etc. Este periodo será de cuando menos cuatro semanas y se está y estará consumiendo en preposadas, posadas, cena de Navidad, en los momentos vacacionales, cena de Año Nuevo, en reuniones con amigos, entre otras situaciones.

Después de vivir y estar viviendo todo el año con actividades académicas, laborales y domésticas, con prisas y exigencias cotidianas, con penurias económicas, entre otras situaciones estresantes, muchas personas quieren relajarse, convivir con familiares y amigos o con la pareja con alegría y desinhibidas.

Y, efectivamente, las bebidas con alcohol por su característica depresora, en un primer momento, con una o dos bebidas, relajan y desinhiben. El problema es que cuando las personas consumen mayores cantidades le continúan otros efectos: disminución del juicio crítico, disminución de la eficiencia en la coordinación muscular, trastornos de la vista y del habla, dificultad para recordar, confusión mental, cambios bruscos del humor, taquicardia, dificultades para respirar y, si la intoxicación es muy grave, muerte por parálisis respiratoria.

Por ello y ante un consumo excesivo de bebidas alcohólicas, muchas personas se ven involucradas y afectadas en peleas, accidentes viales y laborales, delitos, desarrollo de discapacidades, lesiones, perdida de objetos y documentos de valor, violaciones u otros abusos sexuales, afectaciones a su salud, afectaciones a sus relaciones interpersonales, privaciones cortas o más largas de la libertad, multas (en Jalisco la sanción por conducir alcoholizado puede ir de los 13 mil 443 a los 17 mil 924 pesos), etc.

Los momentos que inicialmente serían deseables y de alegría, se llegan a convertir en momentos de frustración, de malestar o hasta trágicos.

Con la numerosa evidencia científica sobre el problema del consumo irresponsable de bebidas alcohólicas y reconociendo el gran problema sociocultural que representa el que las personas no queremos pensar que las desgracias y las tragedias nos pueden llegar también a nosotros, podemos sostener que la vida nos cobra muy caro la ignorancia, la ingenuidad y la inocencia.

Por ello hoy es una oportunidad para que nos demos el tiempo para informarnos, para reflexionar, para dialogar con nuestros seres queridos y que acordemos medidas (que hay muchas) para prevenir las nefastas consecuencias del consumo excesivo de bebidas alcohólicas.

Si te interesa consultar la guía “¿Qué es beber responsablemente?”, puedes conocerla en la página A M E P P de Facebook

[email protected]

jl/I