Quinto Patio

En la asignación de obras del peribús, esas que se fraccionaron en más de 200 contratos (cual cachitos de la Lotería Nacional pa que alcance para muchos) que suman casi 3 mil 800 millones de pesos, no se cuidaron ni tantito las formas. Y es que las obras de ese sistema de transporte urbano fueron asignadas incluso a empresas que no tienen nada que ver con la construcción, como asesores, financieros, vendedores de café y pastas, y, sobre todo, inmobiliarias. Sí, inmobiliarias.

Sin ningún pudor, las obras fueron asignadas a estas empresas que no se preocuparon en cambiar ni el objeto social para el cual fueron creadas y, al menos en el papel, aparentar que podían realizar alguna de las obras. Muchas dudas por aclarar en torno a este sistema de transporte que tanto presume el feneciente gobierno de Enrique Alfaro Ramírez. ¿Qué dice la Contraloría del Estado?

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Si bien la presidenta municipal electa de Guadalajara, Verónica Delgadillo, consideró ayer que el modelo que se sigue hasta ahora para manejar la basura “no puede seguir más”, que hay que construir otro para que todos los días se recojan los residuos afuera de las casas, que en cuanto tome posesión del cargo su equipo elaborará ese nuevo modelo y que habrá espacio para los trabajadores sindicalizados para convertir al municipio en el “más limpio” de México, deja varias dudas, cuando estamos a 12 días de que, si el tribunal electoral no determina otra cosa, asuma el cargo.

¿Renovará o no el contrato con la empresa Caabsa?, porque en diciembre se vence el convenio. ¿Qué piensa hacer no solo en cuanto a la recolección, sino también en temas como, por ejemplo, la separación de los residuos o su disposición final, que ha generado graves daños ambientales por la basura de los tapatíos depositada en dizque rellenos sanitarios?, ¿van con retraso si se considera que apenas en octubre empezarán a diseñar un nuevo modelo?, ¿hará un modelo diferente al del Modelo General de Convenio Específico para la creación de la Agencia Metropolitana de Gestión Integral de Residuos, aprobado por la Junta de Coordinación Metropolitana o cómo es la cosa?, ¿es en serio, en serio, que GDL será “la ciudad más limpia” de México? ¡Ah!

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Y a propósito de las menos de dos semanas que les quedan a los 125 munícipes de Jalisco, salvo los que resultaron reelegidos, el que tendrá solo esos días para estar al frente de la Junta de Coordinación Metropolitana (JCM) es el alcalde interino de Guadalajara, Francisco Ramírez Salcido, luego de que ayer rindió protesta al frente de ese organismo. Dicho espacio es indispensable mantenerlo porque precisamente las futuras administraciones municipales enfrentarán problemas comunes, en los que la lógica dice que deben coordinarse en aras de garantizar eficientes servicios públicos.

Solo que ahora, por un lado, estarán cuatro municipios del oriente metropolitano gobernados por alcaldes surgidos de Morena (Tlaquepaque, Tonalá, El Salto y Juanacatlán) y los de Movimiento Ciudadano (Guadalajara, Zapopan, Tlajomulco), más el del PRI, de Ixtlahuacán de los Membrillos. ¿Hasta dónde las diferencias políticas influirán en las decisiones sobre los grandes problemas metropolitanos? Es la oportunidad de dialogar y buscar consensos. El rol que asuma el gobierno estatal será importante.

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