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Pensiones

El 5 de febrero, el presidente López Obrador presentó una propuesta de reforma al sistema de pensiones para garantizar constitucionalmente que los trabajadores tengan derecho a una pensión de retiro por vejez igual a su último salario.

La reforma se sustenta en la creación del Fondo de Pensiones para el Bienestar. Este será un fondo con un capital inicial de 64 mil 619 millones de pesos (mdp) que “tendrá por objeto complementar las pensiones” para que sean de 100 por ciento del último salario.

¿Por qué resulta relevante la reforma? Sin duda, la misma puede justificarse debido a que las condiciones de retiro de los trabajadores son muy desiguales en el país. Hoy existen más de mil sistemas de pensiones que ofrecen condiciones muy diferentes de retiro para los trabajadores.

La reforma también es relevante porque la población mexicana está experimentando un proceso de envejecimiento acelerado. De hecho, se estima que la proporción de la población de 65 años y más, como proporción de la población total, se incrementará de 8 a 19 por ciento entre 2020 y 2050.

El envejecimiento de la población se ha reflejado en el crecimiento del gasto en las pensiones. Según datos oficiales, solamente en 2023, el pago de pensiones del IMSS creció en 9.8 por ciento. Así, las pensiones absorbieron 66 de cada 100 pesos de gasto total del IMSS.

El gasto de pensiones también se refleja en las finanzas públicas. Hasta antes de la propuesta, en los Criterios Generales de Política Económica 2024, se estimaba que 23.01 por ciento del gasto federal se destinaría a pensiones. Así, se esperaba que el pago de las pensiones sería de un billón 499 mil mdp.

Las cifras anteriores, si bien justifican la necesidad de reformar las pensiones, también evidencian las limitaciones de la propuesta de reforma. El capital total del Fondo de Pensiones para el Bienestar equivale a menos de 4.46 por ciento del presupuesto federal destinado para pensiones de este año.

Las limitaciones de la reforma también se evidencian si se considera que, entre 2022 y 2023, el gasto anual del IMSS en pensiones creció de 623 mil 732 a 684 mil 830 mdp. La variación de gasto de 2023, 61 mil 198 mdp, es similar al total de los recursos del Fondo de Pensiones para el Bienestar.

En mi opinión, la propuesta de reforma a las pensiones es insuficiente para lograr sus objetivos. Las características institucionales, demográficas y financieras del país hacen que, en el mejor de los casos, la reforma preserve la situación financiera del sistema de pensiones en el corto plazo.

Finalmente, no sobra enfatizar que se necesita una reforma verdadera al sistema de pensiones. Sin embargo, deberá ir acompañada de una reforma fiscal y de ajustes en las pensiones para que sea viable. Si no ocurriera así, las pensiones podrían generar una crisis financiera en el país.

*Economista e investigador de la UdeG

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