Magistrado sin sala

A los diputados locales irónicamente no les importa la legalidad, porque prefieren asegurar el reparto de puestos que cumplir con la ley.

Aunque parece un cuento de ficción, los diputados locales en la madrugada del sábado decidieron aprobar un dictamen para modificar una convocatoria para elegir a magistrados del Tribunal de Justicia Administrativa y agregar que se nombraría a uno más para ocupar la séptima sala, la cual no existe y apenas se crearía.

La sesión de la Comisión de Seguridad y Justicia donde se dio esta aprobación no se hizo pública como ha ocurrido con otros dictámenes que se han aprobado, y no hemos podido ver en video para constatar que se realizó, y qué postura tuvieron los legisladores.

Algunos diputados, integrantes de la comisión, aseguran que preguntaron antes de modificar la convocatoria para elegir a ese magistrado si no era necesario modificar las leyes para crear primero la sala, y supuestamente les contestaron que no era necesario hacerlo primero y se podría votarlo después.

Esto es inverosímil porque según los expertos no puedes elegir al personal de un área que oficialmente no está creada y ni siquiera está contemplada presupuestalmente.

En estos momentos, los diputados locales estarían buscando elegir a un magistrado que no tiene personal ni lugar físico para trabajar y ni siquiera un salario asegurado.

Lo único que les importa a los diputados es repartirse el pastel antes de pedir licencia al cargo para irse a las campañas, por eso las prisas.

Esta situación provocará que alguien impugne la convocatoria, como suele ocurrir, y pueda entramparse esta elección como tantas otras. Y en este caso con justa razón legal.

Este tipo de acciones evidencian que lo que más les importa es repartirse el pastel entre quienes actualmente tienen el cargo porque en unos 15 días, el escenario cambiará y la composición será distinta ante la llegada de los suplentes y ya no les tocaría poner nombres, sino que serían otros los que negociarían estos espacios, y eso no les gusta.

Lo sorprendente es que el titular de la Comisión de Seguridad y Justicia, el morenista Tomás Vázquez, esté de acuerdo en realizar estos actos ilegales.

La única explicación posible es que cualquier señalamiento que llegue de ilegalidad podría tocarle a la siguiente legislatura, por el tiempo en que tarda este tipo de impugnaciones y los actuales se lavarían las manos dejando un problema heredado.

Aquí no se sabe si los asesores son nuevos e inexpertos o si los diputados locales no les hacen caso; lo único que podemos afirmar es que nada de esto importa porque en lugar de prevenirlo dejan que este tipo de situaciones pasen y se compliquen legalmente.

Si hacemos un conteo de todas las fe de erratas y las ilegalidades que han cometido en esta legislatura nos faltarían dedos de la mano para poder llevar la cuenta porque parece que a diferencia de sus antecesoras han cometido más vicios de ilegalidad. Y esto empaña todo lo bueno que hayan podido aprobar.

Los legisladores locales le apuestan al olvido y a la impunidad porque lamentablemente todos estos errores no tienen consecuencias ni para ellos ni para sus asesores. Lo único que suele pasar es que les corrijan la plana y la vergüenza pública; sin embargo, ésta ya no les preocupa porque saben que su imagen está muy desgastada.

Y como la culpabilidad se diluye entre todos, no les interesa encontrar responsables porque saben que más de alguno saldrá raspado en este tema u otro.

Aquí parece que se aplica la anécdota de fuente ovejuna, todos a una y con total impunidad.

La legalidad se queda en el olvido y al margen, y nadie dice nada.

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